El ensanche santanderino se construyó durante la segunda mitad del siglo XIX. Tiene, por lo tanto, unos 150 años, y las casas se conservan más o menos (salvando las inevitables reformas) tal cual, por lo que resulta un lugar muy curioso para ir a pasear.
Un barrio construido junto al mar
Es un lugar grande, de casi un kilómetro de largo por medio de ancho, y para contemplarlo, al menos parte de sus calles, plazas, casas, fachadas, miradores, balcones, ventanas…, basta ir a este enlace,
y sumergirse en el montón de fotos que ahí se pueden ver.
Y para que no falte nada, si a alguien le gusta leer puede probar con alguna de estas